4 de diciembre de 2024 (FAP Digital). La ciudad fronteriza de Bermejo, en el departamento de Tarija, enfrenta una creciente demanda de productos por parte de miles de ciudadanos argentinos que cruzan diariamente para realizar compras masivas, atraídos por precios hasta un 50% más bajos que en su país. Este fenómeno ha generado preocupación entre los residentes locales por el desabastecimiento y el encarecimiento de productos básicos.
Impacto en la economía local
Desde alimentos y ropa hasta electrodomésticos y materiales de construcción, los argentinos están adquiriendo grandes cantidades de bienes, lo que ha provocado un aumento significativo en el costo de vida para los bermejeños.
“Se llevan lo que sea. Incluso productos bolivianos como la Coca-Cola están desapareciendo de los estantes porque la mayoría se va a Argentina”, afirmó Andrés Torres, asambleísta departamental.
Migración y contrabando
La Dirección de Migraciones informó que, solo en noviembre, más de 40 mil argentinos ingresaron legalmente a Bolivia, mientras que se estima que otros 10 mil cruzan diariamente por pasos ilegales.
El problema también afecta al norte argentino, donde comerciantes denuncian una competencia desleal debido al contrabando desde Bermejo, conocido como “contrabando hormiga”.
Llamado a la acción
Torres instó al Gobierno central a intensificar los controles fronterizos y atender la problemática, que está afectando tanto a los residentes locales como a los pequeños y medianos comerciantes en ambos lados de la frontera.
Mientras tanto, la Cámara de Comercio de Orán en Argentina ha advertido sobre la caída de ventas en el norte del país y la amenaza que representa el contrabando para la sostenibilidad de los negocios legales.
Bermejo se enfrenta al desafío de equilibrar el impacto económico positivo del turismo comercial con las necesidades de sus propios habitantes.